9 may 2009

Dos son uno

Quizá esta vida no sea más que un sueño del que no hemos despertado aún. Quizá nada sea tan bonito como lo parece ahora. Es cuestión de engañarse a sí mismo y creer en la más pura inoncencia y disfrutar plenamente de la vida a tu lado.

El final ya no es el final, sino el comienzo de olvidar todo lo pasado y dejar fluir las sensaciones a su manera. Ahora sé lo que esto significa, las matemáticas y la física ya no tienen lugar, dejando camino libre a los sentimientos y lo ilógico, donde dos son uno y uno son dos.

Si tú eres real, esto es real, asi que no tengo otra opción que pensar. Soñar y vivir se convirtieron en sinónimos hace tiempo atrás y la dura cáscara que envolvía a este pequeño corazón ya no existe. El amor, la paciencia y la pasión la rompieron y mis sentimientos se liberaron sin los conocidos miedos...nada volvió a ser como antes.
Querría que esto fuera infinito como lo es el universo. Mis ojos no quieren ver un final sin tí, no sólo por no querer sino porque mi final es el tuyo, y si no estás tú ya no habrá nada más. A partir de aquí todo tiene un sentido y un porqué, y si hay algo que no lo tiene, no importa, el misterio del amor es lo enredado que puede llegar a ser.

Nuestros caminos se cruzaron sin avisar previamente. Creo que llevaban tiempo preparándose para la ocasión. Formando a nuestras almas para la unión final. Desde entonces, y sin quererlo, nuestras vidas iban a ser diferentes, y así fue. Y desafiando a las matemáticas de nuevo, digo que uno son dos y dos serán tres.

5 may 2009

En lo más profundo...

Siento mi libertad truncada por lazos invisibles de miedos y cobardías. Pasan los días y se fortalecen, me aprietan fuerte en el pecho. Otras veces parece que las tijeras de ilusión y sueños los rompen, pero siempre vuelven a aparecer.

Se unen sin darme cuenta, como si dependieran de sí mismos. Aunque soy yo la que les da vida y la que ni siquiera sabe como quitarselas. Rondan en mi cabeza constantemente, consiguen que les crea y al final, tomo su desición, perdiendo así mis ansias más profundas, quedando todo en lo más profundo de mi ser sin que nadie pueda verlo. De vez en cuando sale al exterior, pero no tarda en regresar a su guarida.

¡Cobarde!, cuántas oportunidades perdidas. El arrepentimiento vive conmigo. Mi pasado, mi presente, son tan parecidos entre sí. Se miran al espejo y se ven reflejados, miedos enfrentados. Y tras ellos, estoy yo, formando parte de ellos, de mi cuerpo y mente.

Manos extrañas, llenas de amor y amistad consiguen descubrir el tesoro. Quieren sacarlo, para verlo y compartirlo. Y sacan un baúl lleno de polvo, pero está cerrado por cientos de candados que se abren con una sola llave, llave que llevo yo escondida en un lugar que ya ni recuerdo.

Agonía en mi interior y exageraciones que sólo me encierran entre rejas. Quisiera que lo que vive en mí se abra, sea libre y camine conmigo de la mano. Sin barreras, sin nada previo en lo que pensar, sin etiquetas ni pensamientos enredados...en blanco. Sólo en blanco consigo hacer que el baúl sucio y viejo cobre vida y se convierta en el sueño que siempre guardó como un tesoro de ciencia ficción.

"Caminante no hay camino, se hace camino al andar".

27 abr 2009

¿Con o sin?

La gran mayoría hemos ido de pequeños a un zoológico y, seguramente, un 90% ha tenido, por lo menos, una mascota en casa que no sea ni un gato ni un perro. Los zoológicos son tan exóticos e interesantes, con multitud de animales que por primera vez podemos ver "cara a cara". Hace poco fui a uno de ellos y pude estar allí todo un día. Horas y horas que no sé si fueron agradables o no.

El tiburón verlo a través de un cristal tan sólo a unos pocos centímetros de él es sorprendente, puede dejarte casi sin aliento. Un animal aerodinámico, largo, con esas mandíbulas tan grandes, diseñado para cazar.

Los tigres, tanto pardos como blancos. Una armonía de rayas oscuras y claras que le dan un toque de elegancia. Nadie se espera que sean tan grandes. Sus colmillos y sus afiladas uñas reflejan lo que tienen en su poder.

Los pingüinos que puedes ver son de todos los tamaños. Ves de cerca su piel negra y brillante, brillo que en documentales no puede apreciar bien del todo. El pingüino emperador, parece que posa para el público, tan estirado y con su cabecita en alto, prácticamente ni se mueve. El pingüino real, mucho más pequeño y con pequeños flecos rubios, es más dinámico. Algunos nadan de un lado a otro sin parar y chapoteando el agua.

Y podría seguir así en un casi sin fin de especies que allí pude ver. Lo cierto es que de pequeña fui al mismo lugar y me encantó. Esta última vez que fui, que ya podía sacar mis propias conclusiones y podía ser consciente de muchas más cosas, para mí fue ver una condena tras otra, un maltrato cruel y sin remordimientos. Desde mi punto de vista, fue algo horrible.

Esta vez lo que ví fue a unos pobres tigres que no sabían ya a dónde ir, y se pasaban horas y horas tumbados sin hacer nada. Simplemente mirando de vez en cuando al público que los visitaba.

También vi como esos pingüinos estaban en unos pocos metros cuadrados, privados de las acciones que ellos harían en libertad. Caminar cientos y cientos de kilómetros en busca de alimento, mientras los pingüinos machos cuidan de los huevos entre sus patas y esperan a que las hembras vuelvan con comida, ya no es su mundo. Eso para los que están en esa hurna ya no existe. Sólo están quietos, con la mirada perdida, sin un rumbo al que poder ir...nada. Y aquellos pingüinos reales que chapoteaban en al agua, no era porque estuvieran contentos, ni mucho menos, era porque intentaban quitarse la etiqueta que tenían en la pata, algunos en un ala.

Los tiburones están en espacios que no equivalen ni a la cuarta parte del territorio en el que ellos viven, donde necesitan vivir. Intentan recrear lo que se parecería a un ambiente marino, con plantas y rocas, pero estoy casi segura de que los animales acuáticos que están ahí, uno de ellos los tiburones, saben perfectamente que no están en su hogar, o al menos en el que debería ser su hogar.

Mariposas, serpientes, monos, suricatos, delfines, orcas, osos, leones marinos, pájaros de miles de especies, etc. Todos privados de su libertad, que un día el ser humano pensó que tenía el derecho de hacerlo. Y, así, sin mas, raptar a los animales que ellos creen que pueden ser un buen negocio. Una barbaridad.

¿Nadie se ha parado a pensar que no debería permitirse ese rapto, maltrato, prohibición de libertad a los animales? Acaso, ¿ellos no tienen derecho a vivir su vida en el lugar donde pueden vivirla y desarrollar sus facultades?

El tigre deja de ser tigre cuando no caza, no corre, no busca un lugar diferente cada noche para dormír. El tiburón deja de ser tiburón cuando no busca a su presa mediante el olfato, marca su territorio. Los pingüinos dejan de ser pingüinos cuando no viajan cientos de kilómetros en busca de alimento, cuando no salta al mar abierto para cazar, cuando no se apelotonan en los duros días de invierno para sobrevivir...eso es una crueldad que para mí no tiene límites.

¡Por favor! Lo que estamos viendo en los zoológicos, son sólo lo que queda de esos seres vivos.

Si queremos verlos, ¿Por qué no nos desplazamos a los lugares donde ellos viven? ¿Por qué son ellos los que tienen que sacrificar su hábitad, su libertad y sus derechos para que nosotros, tan cómodos, podamos verlos? Acaso, ¿se rapta a personas de una tribu, indígenas de un lugar del mundo y se les mete en jaulas para ser expuestos en otro lugar, y así todos podamos ver cómo son?

Esto debería estar prohibido, ya se le hace bastante daño a nuestro planeta con nuestras actividades antropológicas, como para que, encima, se "maltrate" y se haga lo que uno quiere con los animales que viven en él. ¿Quién se cree el señor o los señores millonarios que tienen el zoológico para tener a esos pobres animales ahí, encerrados, encadenados y "muertos" sin haber muerto? Vuelvo a repetir, es horrible.

El ser humano es un animal más de este planeta. Nuestro error es que confundimos que porque seamos humanos y nosotros tengamos la facultad de ser el animal más inteligente, olvidamos que, aunque otros animales no puedan razonar como nosotros, pueden sentir tristeza, alegría, añoranza, rabia, enfado...en fin, tienen sentimientos con todas las palabras.

Suena irónico que el ser humano sea el animal con los sentimientos más desarrollados, y el que cometa estas atrocidades.

Deberían estar prohibidos los zoológicos, ¡debería considerarse un delito! No tenemos el poder ni el derecho a arrancarle la vida de esa manera. Y muchísimo menos, cuando es por nuestro "querido" don dinero.

21 abr 2009

El elefante encadenado

Cuando yo era pequeño me encantaban los circos, y lo que más me gustaba de los circos eran los animales. Me llamaba especialmente la atención el elefante, que, como más tarde supe, era también el animal preferido por otros niños. Durante la función, la enorme bestia hacía gala de un peso, un tamaño y una fuerza descomunales...Pero después de su actuación y hasta poco antes de volver al escenario, el elefante siempre permanecía atado a una pequeña estaca clavada en el suelo con una cadena que aprisionaba una de sus patas.
Sin embargo, la estaca era sólo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en el suelo. Y, aunque la cadena era gruesa y poderosa, me parecía obvio que un animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su fuerza, podría liberarse con facilidad de la estaca y huir. ¿Qué lo sujetaba entonces? ¿Por qué no huye? [...]

Hace algunos años, descubrí que, por suerte para mí, alguien había sido lo suficientemente sabio como para encontrar la respuesta: el elefante del circo no escapa porque ha estado atado a una estaca parecida desde que era muy, muy pequeño.
Cerré los ojos e imaginé al indefenso elefante recién nacido sujetado. Estoy seguro de que, en aquel momento, el elefante empujó, tiró y sudó tratando de soltarse. Y, a pesar de sus esfuerzos, no lo consiguió. Hasta que, un día, un día terrible para su historia, el animal aceptó su impotencia y se resignó a su destino.

Ese elefante enorme y poderoso que vemos en el circo no escapa porque, pobre, cree que no puede. Tiene grabado el recuerdo de la impotencia que sintió poco después de nacer.

Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese recuerdo. Jamás, jamás intentó volver a poner a prueba su fuerza...

Todos somos un poco como el elefante del circo: vamos por el mundo atados a estacas que nos restan libertad. Vivimos pensando que "no podemos" hacer montones de cosas, simplemente porque una vez, hace tiempo, lo intentamos y no lo conseguimos.
Hicimos entonces lo mismo que el elefante, y grabamos en nuestra memoria este mensaje: "No puedo, no puedo y nunca podré". Hemos crecido llevando ese mensaje que impusimos a nosotros mismos [...].

Tu única manera de saber si puedes conseguirlo es intentarlo de nuevo poniendo en ello todo tu corazón...¡Todo tu corazón!
Libro: Déjame que te cuente.
Autor: Jorge Bucay
P.D: Pensé en poner este pequeña historia sacada del libro "Déjame que te cuente", porque creo que muchos nos podemos sentir identificados con ella. Espero que les guste. Un saludo!

15 abr 2009

Do, Re, Mi, Fa, Sol, La, Si.

He buscado definiciones a la música, tales como: la música es el arte de organizar sensible y lógicamente una combinación coherente de sonidos y silencios utilizando los principios fundamentales de la melodía, la armonía y el ritmo. Es sonoridad organizada, el arte de combinar bien los sonidos con el tiempo. En definitiva, palabras que se quedan vacías, que describen de una manera fría, sin llegar ni siquiera a lo que, desde mi punto de vista, es música.

Ella es más que sonidos y silencios. Mucho más que organización o combinaciones en el tiempo. La música es la expresión del alma, del ser que siente y padece. Es mi apoyo, mi guía y mi liberación. Es ella quien hace de mí lo que soy. Me hace caminar a un ritmo que ella misma marca. No existen barreras ni límites. Ando de la mano con ella por su mundo, que al fin y al cabo acabó siendo el mio. Me mueve como una marioneta en esta vida, vida que no sería vida sin ella.

La música me hace creer en mí misma, gracias a ella soy lo que soy y vivo como vivo: con y para ella. Mi amiga infinita, mi gran apoyo incondicional.

13 abr 2009

Carta anónima

Eres brillante cuando naces y oscuro cuando creces. Estás diseñado para gustar, geométricamente perfecto, aunque el paso del tiempo no perdona. Has cambiado mucho desde que viniste al mundo. Estás irreconocible desde entonces.

Despiertas pasiones, sabes consolar como nadie supo hacerlo. Tienes el record en enamorar a miles y miles en muy poco tiempo ¿Cómo lo haces? Todos desean tenerte, pasar una vida contigo...para los ateos eres como su Dios personal. Te has convertido en el centro del mundo, en el que da la razón de ser a la existencia. Has pasado a ser el alma de todo. Hay muchos que entregan su vida por ti, otros mueren en el intento. ¿Te das cuenta de lo imprescindible que has llegado a ser?

Hay quien no se imagina una vida sin tí. Te valoran, te adoran, te quieren. Y yo me pregunto ¿Cómo es posible? Tú, que ni siquiera hablas, ni siquiera ríes ni lloras. Tú, que no puedes sentir ni escuchar, que ni siquiera sabes de tu existencia...Contigo se puede tener todo y nada, tanto y tan poco...¡TODO! y casi nada.


Por suerte a mí no me has conquistado.


Carta a Don Dinero.


6 abr 2009

Dos pequeñas grandes frases

"El sexo está involucrado, la ilusión predomina, la obsesión es inevitable, el grado de control consciente es muy modesto y el tiempo de gloria, breve."

Sheila Sullivan.
Libro: El viaje al amor (Eduardo Punset)

"La felicidad está escondida en la sala de espera de la felicidad"

Eduardo Punset.

Libro: El viaje a la felicidad